Azul...

Rebeca adora el color azul. Desde siempre ha sentido fascinación por tal color...

 Azul, como el intenso cielo que la protege.

 Azul, como el mar que la tranquiliza.

 Azul, como un frío día de invierno que invita a descansar.

 Azul, como el equilibrio y serenidad que busca.

 Azul, sugiriendo espiritualidad y orden.

 Azul, con deseos de paz, tranquilidad e incluso un poco de soledad.

 Azul, que provoca un leve sentimiento de melancolía.

 Azul, que despierta protección de los demás.

 Azul, de espiritualidad y arte.

 Azul, raro de encontrar en el mundo de las flores, y que hace reinas a las hortensias.

 Azul, de despedida, quizás para no verse más.

Azul como sus ojos, herencia genética, familia, raíces.                 

Azul, como aquella canción o aquel libro de poemas de Rubén Darío.